lunes, 12 de junio de 2006

Los cachorritos

Cuando empecé a escribir este blog (aunque bien mirado, creo que lo he escrito siempre), nunca pensé que llegaría a formar parte de mi vida de esta manera. Siempre he escrito de lo que me ha sucedido personalmente o como me afecta lo que ocurre alrededor mío... pero últimamente me he descubierto observando para contarlo, para compartirlo, para que otras personas sientan algo similar. Aunque con lo que me tropecé ayer en el parque, mientras mis hijas jugaban, no me lo esperaba... más bien llegué a la conclusión de que era digno de formar parte del antiguo apartado de Geyper: "Imágenes surrealistas"


Wendeling acude, como cada día, al parque, con sus hijas. Un par de horas de relax, leyendo en un banco bajo un árbol, aunque desde que le pasó aquello, le cuesta sentarse en ese banco. Gracias a que hay más... Y las niñas vuelven a casa cansadas, satisfechas y con ganas de irse a la cama pronto.

Ayer, había un hueco libre en un banco, ocupado por una abuelísima, que se desvive por su nieta de siete años de madre desaparecida en combate (su propia hija) y una madre de hija única, que se desvive por que su hija tenga todo lo imaginable (materialmente hablando). Wen las conoce de tropezarse literalmente día a día en el parque.

- ¿Está libre?

- Claro, por supuesto. Hola

- Buenas tardes.

Wen se dispone a leer el final de su libro, pero no puede evitar escuchar retazos de la conversación de las dos señoras:

- Lo tengo comprobado... cada diez minutos. Tarda exactamente diez minutos en volver a llamarme, me tiene toda la noche en vela. ¡Qué ganas tengo de que crezca ya y me deje dormir unas horas seguidas!

- Eso es lo que les pasan cuando son pequeños, necesitan que estén constantemente pendientes de él. Al mio lo he acostumbrado a dormirlo a las ocho de la tarde y normalmente hasta las diez del día siguiente está tronco.

- ¿Tantas horas? ¿Cómo lo haces?

- Pues apagándole la luz.

- ¡Ah!... Yo lo he intentado así, pero se me pone a hacer ruiditos, no hay manera de que calle hasta que voy ¿De que raza es el tuyo? Si son compatibles, podríamos emparejarlos cuando sean adultos ¿Te parece?

- Nunca lo he hecho, no tengo ni idea de como se hace.

- Pues juntándolos, mujer.

Wendeling las mira de reojo: "vaya, ya las han enganchado con algún cachorro de perrito para las niñas y éstas se han aburrido a las pocas horas, como si las estuviera viendo".

En eso, algo comienza a pitar en el bolso de la abuela, ésta rebusca dentro, sacando una botella de agua, toallitas húmedas, el monedero, las llaves.... sigue el pitido más alto e insistente... el móvil.... y por fin el pitido deja de oírse.

- ¿Y ahora que quiere? Vaya... me ha salido cagón, es una mierda.

Wendeling, sorprendida al escuchar la frase levanta la vista del libro y mira directamente a la madre de hija única.

"¡Es un tamagochi! ¡Están enganchadas a los tamagochis!"


Y no puede evitar reirse, pensando en las dos señoras, con sus años acuestas y divirtiéndose con el juego que sus respectivas niñas han desechado poco después de tenerlo.

- Wen ¿Tú no tienes uno de éstos?

- Deja, deja, yo con dos de esas - señalando a Estel e Ithilien - tengo por varios años y además a las puñeteras no se les acaban las pilas.

2 comentarios:

Wendeling dijo...

Comentario:
Delirante¡¡ no me lo puedo de creer... pero a qué parque vas, con esa fauna... no será zooilógico? jajajajajajaja
Desde luego, es una mina, ese parque... ;DDDDDDD
A mi me regalaron uno y se lo tiré a la cresta a quien fuera (no me acuerdo¡) seguro que dejamos de ser amigos JAJAJAJA

Malamala 17 Junio, Sábado 12:07 (Web)

Comentario:
Pues fijate, cuándo han empezado a preguntarse de que raza eran y si los cruzaban yo pensaba que es que sus niños eran adoptados. Me parecia un poco fuerte que hablaran de los crios en esos terminos, pero cómo te encuentras con esa gente tan rara...

En fin, que un beso, encanto.
Maestro del Escaqueo 13 Junio, Martes 20:02 (Web)

Comentario:
Geniales las dos señoras, que se diviertan como deseen, ya les toca. Genial por tu manera de contarlo, no sabes la cantidad de cosas que, me imaginé mientrsa leía.

Besos
Elvira 13 Junio, Martes 17:47 (Web)

Comentario:
Jajaja... que bueno. A esas edades y con tamagochis...jajaja.
Besos.
lara 13 Junio, Martes 11:50 (Correo) (Web)

Comentario:
hola...
wnedy...ese parque tienes para escribir un libro tesoro jajajaja...
tu blog es tu diario...y me encanta...
besos
Donosito 13 Junio, Martes 11:48 (Web)

Comentario:
Luego dicen que la tercera edad está reñida con la tecnología!

Un beso
Ojos verdes 13 Junio, Martes 10:29 (Correo) (Web)

Comentario:
Yo tengo un sobrino de 13 años que está enganchado a la Nintendog o algo así. Es como los cagagochis esos pero algo más sofisticado. Vaya manera de cuidar a su perrito, si hiciera igual con su perrita Serena, ésta iba a estar como una reina.

Un beso
Franfri 13 Junio, Martes 08:19 (Correo) (Web)

Comentario:
jajajjajaa sabes? me apuesto q las propias hijas, son las q tenían obligadas (por así decirlo)a sus madres para q cuidara el tamagochi. Me lo imagino así, pq lo ví cuando yo era peque y así veía a mis compañeras de clase... detrás de sus madres, y rogándole pq le diera su comidita, o jugara con ellos etc etc... xDDDDDdddd
Personalmente, nunca tuve ninguno, vamos ni de coña. Bastante tengo con cuidarme yo, como para aguantar un aparatito q incluso despierta de noche con la intención de q quiere juego o lo q sea. Vamos lo q me hubiera faltado!
fffffff la verdad maia... es q no te imaginaría con uno jejejejje

besos maia!
Diablilla 13 Junio, Martes 02:22 (Correo) (Web)

Wendeling dijo...

Comentario:
me parece muy friki ver a dos abuelas jugando a los tamagochis. lo que no te pase a ti ! .juas
vergonzoso 13 Junio, Martes 02:21 (Correo) (Web)

Comentario:
Hay gente para todo, eeeeh.

XDDDDDDDDDDD

Y no las ves con las DS porque seguro que no les llega el presupuesto... pero los perritos son tan monos!!!
Anazia 13 Junio, Martes 00:04 (Web)

Comentario:
Por suerte, tu blog no es cagón y deja dormir, porque yo también estoy enganchado.

Besos
HSolo 12 Junio, Lunes 23:56 (Correo) (Web)

Comentario:
Yo tambien tengo una historia.. me llevé el de Paula sin querer en el bolso... estaba en una reunión con los jefazos de una marca muy conocida.. y de repente... bip bip bip.. que se caga el muy... como no callaba tuve qe sacarlo, muerta de vergüenza, para mi sorpresa uno de ellos se echa la mano al bolsillo de la chaqueta muerto de risa... llevaba el de su hijo!! jajaja. Besicos.
Zarem 12 Junio, Lunes 23:38 (Correo) (Web)

Comentario:
Jajaja, gracias Un tal Javi... corrigiendo.
Wendeling 12 Junio, Lunes 23:28 (Web)

Comentario:
Qué recuerdos!!!
Yo tenia uno, de los primeros... asi que nada de crecer de esas maneras y menos eso de procrear :p
Ande estará mi tamagochi? `:p
Monty 12 Junio, Lunes 23:25 (Web)

Comentario:
Como si no hubiera tenido suficientes cacas que limpiar a mis tres hijas, la menor se envició hace unos meses con el dichoso cacharro jodelón, al que hay que dar de comer, jugar con él y poco menos que leerle cuentos también, y claro, treinta y no se cuantas generaciones le duró hasta que por un descuido le salieron alitas y voló al cielo para mi alivio, porque me lo tuve que llevar hasta al trabajo porque en el cole se lo prohibían, de locos.
Ahora lo ha revivido y está otra vez enganchada como las viejas del parque, y ya le he dicho que conmigo con cuente esta vez como canguro.
Por cierto Wen, es Tamagochi
Un talJavi 12 Junio, Lunes 23:25 (Web)