El día en que los padres descubran que querer a un hijo no significa darle todo lo que nosotros quisimos de niños y no tuvimos...
El día en que unos padres aprendan que amar a un hijo es estar ahí, a su lado cada vez que nos necesiten, aprendiendo con él, apoyándole en sus problemas, ayudándole a crecer y madurar y que amar a un hijo no significa que el niño tenga todo el dinero que pida, ni todos sus caprichos...
Tal vez ese día, esta civilización nuestra tenga esperanza de sobrevivir y evolucionar hacia mejor.
Nota: madurar significa aprender de nuestro errores, aceptarlos e intentar ser un poquito mejor al día siguiente.
2ª nota: Por mucho que no lo acepte, no quiere más el padre que se gasta mil euros en el regalo de reyes de su hijo, sino el que ríe y llora con él.
1 comentario:
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Por descontado Amy, nunca hay que generalizar... mi post es referente a cierto grupo de padres que conozco que sustituyen la no dedicación a sus hijos (y su sentimiento de culpabilidad por ello) por regalos muy muy muy caros. Como ejemplo, una pareja con dos hijos de 13 y 6 años, que se van de viaje estos días de Navidad, porque "hay que descansar del stress que le provocan los niños" y como sustituto por no estar con ellos en estas vacaciones y dejarlos con los abuelos, les han comprado un ordenador personal a cada uno y atención... un "caballo".
Eso si, sus hijos no necesitan su atención, porque están muy bien cuidados por los abuelos, los tropecientas clases extraescolares y los profesores del colegio.
Besos de una maia.
Wendeling 10 Diciembre, Lunes 12:40 (Web)
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Mejor no mezclar el dinero con las demostraciones de cariño porque no tienen nada que ver y no creo que estén relacionadas. Hay padres humildes que no se ocupan de sus hijos, sin sustituir ese cariño por regalos carísimos y padres con un nivel económico elevado que se desviven al igual que alguien que sólo posee tiempo y cariño que ofrecer aún viviendo una situación económica distinta. El dinero no tiene tanta importancia en la vida de los niños como en la de los adultos, los niños siempre son ajenos al coste de los regalos de los que disfrutan y por supuesto que las referencias que hacen los unos y los otros son por lo que escuchan de sus padres.
Amy 10 Diciembre, Lunes 11:09
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El problema es que de esto muchos niños no se dan cuenta hasta que son mayores.
Besos.
lara 6 Diciembre, Jueves 10:59 (Correo) (Web)
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Cada uno educa conforme a sus principios, bases, ética ... etc. Luego vienen las consecuencias y la responsabilidad de sus actos. Bicos.
Álex 5 Diciembre, Miércoles 21:38
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Después de más de un año me paso por aquí y veo que sigues como siempre. Te releeré un poco para ver como siguen tus cosas, tus amores, tus niñas y tus cosas.
Tienes mucha razón con respecto a la maternidad
lucelle 5 Diciembre, Miércoles 15:24
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Porque, al final, siempre se añora más un abrazo que cualquier otar cosa.
Elena 5 Diciembre, Miércoles 15:16 (Web)
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En estos momentos me encantaría que mis padres pensaran como tú. Me siento un poco sola y necesito notar que me quieren y que se preocupan por mi.
Se que lo hacen pero necesito que me lo demuestren.
Cuanta verdad en tus líneas.
Un besazo.
abeja-maya 5 Diciembre, Miércoles 13:17
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Estoy como casi siempre, en total acuerdo contigo. Estoy orgullosa de mis hijos, sin play, sin wii, con ilusión por cosas sencillas, porque saben lo que es bueno para ellos y lo que no, porque hacen deporte en vez de sentarse delante de la consola, y porque me felicitan por la educación que les doy. Soy estricta con ellos,pero les demuestro constantemente lo mucho que los quiero, y les recompenso por sus esfuerzos.Esto es tiempo, y quebraderos de cabeza, pero no puede haber una recompensa más grande que el cariño que me dan y ver que estos adolescentes son buenas personas.
Mabel 5 Diciembre, Miércoles 10:55
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