miércoles, 19 de septiembre de 2007

Geranios

La casa del fantasma original de Wendeling estaba compuesta por un dormitorio, una cocina, una sala, una cuadra y un patio, que hacía las veces de gallinero y de servicio para aguas mayores y menores de los habitantes de la casa. También tenía una planta alta que servía de pajar y trastero, de gran almacen para la familia. Con el tiempo, convirtieron la cuadra en un pequeño dormitorio y construyeron otro en la primera planta, restándole algo a ese enorme almacén.

Más adelante llegó la modernidad a la casa y un resto de patio se convirtió en un servicio con todos los adelantos: agua corriente, agua caliente, plato de ducha y taza. En su lugar desaparecieron gallos, gallinas y pollitos. Una escalera exterior y el techo del lavabo se transformó en una pequeña terraza en la que Wen le encantaba perderse leyendo, sintiendo el sol en su piel colándose entre los agujeros de una vieja cortina que hacía de quitasol.

Y que su abuela llenó de geranios. Decenas y decenas de macetas llenas de distintas variedades, de hojas más grandes y más pequeñas, de hojas más o menos dentadas, de verde más claro o verde oscuro. De flores blancas, rojas, rosas, de un solo color o bicolores... De pétalos más grandes o más pequeños, de geranios que olían si restregabas tus dedos en sus hojas y de geranios de flores minúsculas...

Wendeling no puede evitar unas lágrimas al recordar a su pequeña abuela, que no llegaba a los ciento cincuenta centímetros, de rodillas en la terraza, plantando una pequeña ramita de una nueva planta de geranio que había pedido a una vecina, contándole a una Wen niña que ese en particular tendría unas flores muy rojas, de pétalos muy grandes. Rodeada de todas sus macetas, en plena explosión primaveral. Para Wendeling los geranios serán siempre las flores de su abuela.

1 comentario:

Wendeling dijo...

Comentario:
Madre mía, que recuerdos los geranios..... Mi madre tenía la terraza llena de geranios, le peor es que yo no soportaba su olor, jajajajjajajajajajaja....
Pero me has hecho recordar la de tardes con mis hermanas sentadas en la terraza, hablando.

Un besazo guapo.
abeja-maya 28 Septiembre, Viernes 09:30 (Web)

Comentario:
Leyendo este post me acabas de recordar a mi infancia, pero sobretodo a mi madre. A ella le encantaban las flores, siempre tenía los balcones y la terraza llena de flores. Los geranios le encataba ponerlos en las rejas de las ventanas
MaRa 24 Septiembre, Lunes 00:33 (Correo) (Web)

Comentario:

Me encantan los geranios, Sevilla estaba lleno de ellos. Bicos.

Álex 23 Septiembre, Domingo 00:12

Comentario:
hola os pido ayuda para difundir los actos del 29 de septiembre y dos de octubre dia de la no violencia puedes ver nuestro blog y si te interesa ayudar a su difusion

un fuerte abrazo
miguel angel 20 Septiembre, Jueves 20:21 (Correo) (Web)

Comentario:
Una de las flores más humildes y que yo creo que no ha faltado en casi ningún balcón o jardín o terraza de nuestras casas. Mi madre siempre andaba buscando esquejes de geranio para poner en sus macetas...

Besos
Nanny-Ogg 20 Septiembre, Jueves 18:57 (Correo) (Web)

Comentario:
Para mi son las flores de mi madre.
Antes en casa de mis padres había un balcón enorme de hierro y todo lo larga que era la barandilla estaba adornada con tiestos de geranios.
A mí también me recuerdan a mi infancia.

Besotes.
Basileia 20 Septiembre, Jueves 15:32 (Web)

Comentario:
La terraza de mi abuela está llena de geranios tb :) Y las flores de mi abuelo siempre serán los pensamientos...
un besito
Arzella 20 Septiembre, Jueves 12:55 (Web)

Comentario:
Pues sí, a mi también me has traido a la mía a mis recuerdos y en días como hoy que estoy tristona, se me escapan las lágrimas, todo igual excepto los nombres, el patio que tu llamas así en la mancha se llama corral. Ella nunca quiso tener baño con agua caliente y plato de ducha, eso lo hacía en casa de su hija. Nunca desaparecieron las gallinas mientras ella estuvo, y también tenía algún que otro geranio, pero lo suyo eran las crestas que en noviembre y cuando las llevábamos al cementerio eran la envidia del pueblo. Ojalá todo lo que nos han contado sea cierto, me gustaría volverla a ver.
Un beso maia
Anamen 20 Septiembre, Jueves 09:42 (Web)

Comentario:
Me has hecho recordar a la mia... curiosamente también "coleccionaba" geranios, ya ves.. a tantos km... besitos
Zarem 19 Septiembre, Miércoles 23:56 (Correo) (Web)