viernes, 16 de junio de 2006

Libre

En casa de mis abuelos había una televisión en blanco y negro... una de las primeras televisiones que entraron en el pueblo. Mi abuelo la consiguió por mediación del hijo de un amigo, que las fabricaba manualmente, una a una. Había montado una pequeña empresa familiar y surtió durante años a los habitantes del pueblo. Él también era el encargado en repararlas si había algún problema.

¿La marca? Telemundi.

Años después, se atrevió con los aparatos en color. Televisión que mi abuelo volvió a comprarle y televisión que todavía hoy, sigue funcionando en su casa. La pequeña empresa, finalmente desapareció, cuando los habitantes del pueblo decidieron confiar en marcas más conocidas, por anuncios que habían visto en esas mismas televisiones.

Cuando finalmente fui a vivir a casa de mis padres, no me extrañó nada ver una televisión en blanco y negro marca Telemundi. Aunque finalmente decidieron comprar otra en color, Grunding.

En casa de mis padres también había una pequeña radio a transistor. Recuerdo las miles de horas escuchando las radionevelas, que mi madre iba saltando de cadena a cadena, conforme terminaba una.

Merendando, tomando mi pan y chocolate mientras hacía los deberes, y como fondo el run...run... de la máquina de coser (mi madre era modista y todas las tardes, durante cuatro o cinco horas, el ruido de fondo era su máquina de coser) y mientras "Lucecita" intentaba solucionar sus insolucionables problemas.

Pero lo que me ha traído hoy todos estos recuerdos, es haberme tropezado por casualidad, mientras escuchaba la radio, una canción... tema que mi madre gustaba cantar mientras hacía las tareas de casa. Mi sorpresa ha sido mayúscula, cuando hoy, después de miles de veces oírsela cantar, he entendido realmente el sentido de la canción. Y la imagen infantil de flores saliendo del pecho, se ha transformado en dolor por una muerte.

No es la primera vez que me sucede algo similar. Una lectura realizada veinte años después cobra un sentido por completo distinto al que originalmente le había dado. Una imagen cambia su color cuando la vuelves a ver pasado el tiempo... pero si es la primera vez que es una canción, la que me golpea con su dureza, a pesar de la belleza de una voz.


LIBRE (Nino Bravo)

Tiene casi veinte años y ya está cansado de soñar,
pero tras la frontera está su hogar, su mundo, su ciudad.
Piensa que la alambrada sólo es un trozo de metal,
algo que nunca puede detener sus ansias de volar.

Libre, como el sol cuando amanece, yo soy libre como el mar...
Libre, como el ave que escapó de su prisión y puede, al fin, volar...
Libre, como el viento que recoge mi lamento y mi pesar,
camino sin cesar detrás de la verdad y sabré lo que es,
al fin, la libertad.


Con su amor por bandera se marchó cantando una canción,
marchaba tan feliz que no escuchó la voz que le llamó,
y tendido en el suelo se quedó sonriendo y sin hablar,
sobre su pecho flores carmesí, brotaban sin cesar...


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3 comentarios:

Wendeling dijo...

Comentario:
Vos sabés que debo haber escuchado miles de veces esa canción pero nunca llegué a oir el final??? Increíble, no? increíble. gracias porque me cambió el sentido totalmente, es más siempre tuve in mente
la parte del estribillo...qué bruta!
Cris 20 Junio, Martes 03:23 (Correo) (Web)

Comentario:
Je, mi padre me cuenta que una vez fue a mi pueblo a actuar Nino Bravo, con tan mala fortuna que para un artista que llegaba, todos se esperaban que fuera cantaor de flamenco: Le abuchearon.
buenos dias
anamen 19 Junio, Lunes 09:18 (Web)

Comentario:
Preciosa frase Álex. Gracias.

Y gracias también a todos por vuestros comentarios. Besos.
Wendeling 18 Junio, Domingo 22:46 (Web)

Comentario:

Las canciones a veces cobran vida a través del dolor o de la alegría.
Álex 18 Junio, Domingo 22:43 (Web)

Comentario:
Hermosa letra, ahora cobra otro significado, además de tus recuerdos.

Un beso
Elvira 18 Junio, Domingo 22:33 (Web)

Comentario:
Yo no conocía la canción...y al leerte y escucharla mientras lo hacia, se me ha puesto la piel de gallina como diria mi abuelo...

Un abrazo Wen y buen finde!!biko azul
Azul 17 Junio, Sábado 16:07 (Web)

Comentario:
Desde luego... Nunca había escuchado la canción entera...
Anazia 17 Junio, Sábado 12:31 (Web)

Wendeling dijo...

Comentario:
Recuerdos de tele, pues una en blanco y negro con 3 botones para canales (y sobraba uno). Marca, ni idea, pero aún la tienen guardada y funciona perfectamente.

La canción... me ha puesto los pelos de punta... me ha gustado volver a oirla, aunque con ella hayan vuelto recuerdos muy tristes.

Un saludo
Holly Golightly 17 Junio, Sábado 11:31 (Correo) (Web)

Comentario:
En casa de mis abuelos no se escuchaba la radio. Había una, pero no la recuerdo jamás encendida. Es que mis abuelas eran muy atípicas: ni escuchaban radionovelas, ni cosían a máquina ni hacían lo que todas las abuelas normales (como por ejemplo darle un beso a sus nietos).

Del primer televisor que hubo en mi casa me acuerdo perfectamente. Fue en 1966 (en blanco y negro, por supuesto) y cuando el técnico lo puso en marcha la primera cara que apareció en la pantalla fue la de un actor llamado Pablo Sanz, que esos años salía mucho en TVE.
Kotinussa 17 Junio, Sábado 10:57 (Correo) (Web)

Comentario:
Hay muchas cosas capaz de hacer saltar los muelles de los recuerdos, pero para mí las canciones no son una de ellas. Posiblemente porque llevo escuchando muchas al día desde hace años y me sería imposible asociar alguna con un período concreto. Los olores o incluso sabores sí que en ocasiones me han catapultado años atrás.

Y hablando de viejas TV, con este post me ha venido la memoria de la primera tele a color que ví en mi vida. Pertenecía a unos tíos mios y presidía el salón de su piso. Justo el mismo que ahora, unos 30 años más allá, habito yo. Incluso este PC donde ahora tecleo se encentra en el mismo lugar que antaño le estaba reservado a aquella flamante Grundig. Curioso donde nos lleva el tiempo...
cieso 17 Junio, Sábado 10:54 (Web)

Comentario:

Felicidades, Wen. Yo también guardo esos recuerdos impagables de radionovelas y máquina de coser...con mi abuela querida. Va desde aquí un beso allá donde esté con su hijo, que es mi padre.
Hermosas personas que me llenan siempre y que hoy han venido a reír conmigo mientras leíamos tu post y a Javi y se nos ha ido la memoria a aquellos lejanos días.
Las televisiones que todos tuvimos, las hizo alguien a mano, a válvulas, tardaban un montón, se ponían las rayas en lo mejor de los dibujos...niña, quita las rayas...cuántas veces esa frase...darle media vuelta una especie de palanquita que había detrás hasta que volvían inevitablemente 5 minutos después...sí, era una mierda de tele, como dice Javi, pero cuanto nos hizo soñar... No cambio esos recuerdos por nada...
Inés Perada 17 Junio, Sábado 09:03

Comentario:
Pasaba x aqui y queria mandarte un besitooooo...
Pues eso...

Muaaaaaaaaks
Gabri 17 Junio, Sábado 00:15

Comentario:
Estamos nostalgicas? Esa canción es dura, pasa como con momentos en la vida... a veces sólo con el paso del tiempo te das cuenta de lo duros que fueron y de que al final se lograron superar.. no te ha pasado mi niña? Besicos "descerebrados" :-P
Zarem 16 Junio, Viernes 23:11 (Correo) (Web)

Comentario:
Me veo con la boca abierta sentado en el suelo frente a un televisor Pye de segunda mano, blanco y negro de 15 pulgadas y metro y medio de fondo, con unas ruedecitas blancas para sintonizar el flamante UHF, hoy la 2 de TV. Los vecinos, mas pudientes, se compraron un Silvania grande aunque también en blanco y negro y le vendieron a mi padre el viejo Pye inglés, que funcionaba a base de manotazos que todos en casa aprendimos a darle.
Era una mierda de tele, pero era nuestra tele y nos embobaba tenerla.

Mi tía Juana, tia de mi madre mejor dicho vivía en mi casa y fue costurera toda la vida, aún conservamos su Singer en perfecto estado, y recuerdo la revolución que armó cuando compró una "tricotosa" (máquina para hacer tejidos de punto)que ocupaba media habitación, pero que le ahorraba horas y horas de trabajo.
Y el pan y la onza de chocolate, y las novelas de la radio... desde luego Wen, a mí no me falta memoria y vivo los recuerdos como si hubiera sido anteayer, pero siempre consigues sorprenderme con lo paralelos que son a los mios.
Un tal Javi 16 Junio, Viernes 21:25 (Web)

Viviana de Mamás y Bebés dijo...

Yo hasta hoy me entere que se la dedico a un aleman, que murio intentando atravesar el muro de Berlin.